Hace unos días, Espinosa de los Monteros volvió a ser el punto de encuentro de cientos de corredores de montaña dispuestos a enfrentarse a uno de los retos más duros del norte de España: La Picón Castro. Esta emblemática prueba de trail running recorre algunos de los parajes más espectaculares y exigentes de la provincia de Burgos, combinando belleza natural, desniveles extremos y una climatología cambiante que pone a prueba incluso a los más experimentados.
En esta última edición, Proyecto Más Vida ha estado presente una vez más, cardioprotegiendo la carrera con la instalación de desfibriladores (DESA) en puntos estratégicos y colaborando con la organización para garantizar una respuesta rápida ante cualquier emergencia cardíaca. Porque cuando se trata de salud, cada segundo cuenta.
Una carrera que exige el máximo... también al corazón
La Picón Castro no es una carrera cualquiera. Con varias modalidades (Ultra, Sky y Trail), su recorrido atraviesa zonas de alta montaña como el Picón Blanco o Castro Valnera, superando largas distancias y fuertes desniveles acumulados. La modalidad Ultra, por ejemplo, supera los 60 kilómetros con más de 3.700 metros de desnivel positivo, en terrenos técnicos donde el cansancio y el entorno pueden suponer un riesgo real.
Durante horas de esfuerzo intenso, con cambios de altitud, condiciones meteorológicas adversas y tramos muy exigentes, el cuerpo puede responder de forma inesperada. Y por eso, contar con medios de cardioprotección no es un lujo, sino una necesidad.
¿Por qué es tan importante contar con desfibriladores en este tipo de pruebas?


Una parada cardiorrespiratoria puede ocurrir en cualquier momento, incluso en personas jóvenes y deportistas. Y en pruebas de montaña como esta, donde el acceso sanitario no siempre es inmediato, disponer de un desfibrilador cercano puede ser la diferencia entre la vida y la muerte.
Cada minuto cuenta. Si se actúa con un DESA durante los primeros 3 a 5 minutos tras una parada, las probabilidades de supervivencia pueden superar el 70 %. Por eso, desde Proyecto Más Vida desplegamos desfibriladores en distintos puntos del recorrido, y nos aseguramos de que el personal de apoyo estuviera formado y preparado para actuar.
Proyecto Más Vida: compromiso real con la prevención
Nuestra participación no se limita a instalar equipos: trabajamos codo con codo con la organización para diseñar un plan de cardioprotección eficaz, adaptado a las características del recorrido y a los puntos de mayor riesgo. Supervisamos el estado de los equipos, formamos a voluntarios en maniobras de RCP y apoyamos a los responsables de seguridad del evento para actuar con rapidez ante cualquier incidente.
En esta edición de La Picón Castro, el mensaje ha sido claro: el esfuerzo y la protección deben ir de la mano. Cuidar del corazón de los corredores es tan importante como cuidar el trazado o la logística.
Un paso más hacia un deporte más seguro
Desde Proyecto Más Vida seguimos apostando por un deporte más humano, más consciente y más seguro. Cardioproteger carreras como La Picón Castro es parte de nuestro compromiso con la prevención y la salud pública. Y creemos firmemente que cada organizador de eventos deportivos debería contar con un plan de cardioprotección.
Gracias a todos los que hicieron posible esta edición. Gracias por confiar en nosotros para cuidar de lo más importante: la vida.