Con motivo de la semana del corazón vamos a analizar cuáles son las distintas formas que tenemos de medir nuestro ritmo cardíaco. Todas ellas están al alcance de nuestra mano y nos van a ayudar a no dejar de lado algo tan importante como la salud de nuestro corazón.

Cabe recordar que las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en el mundo y las tradicionales de ECG ya no se realizan solo en hospitales y consultas médicas en sesiones donde tienen que llenar nuestro cuerpo de sensores en el pecho, en los brazos y en las piernas. De la mano de la tecnología proponemos cuatro maneras de controlar nuestras pulsaciones a lo largo del día y así contribuir a mejorar nuestra salud cardiovascular.

Relojes con sensores de ritmo cardíaco

Las pulseras y relojes GPS se han convertido en un complemento indispensable para deportistas amateurs, incluso para aquellos que no hacen deporte de manera tan regular pero que quieren medir su actividad física diaria. Este tipo de dispositivo incorpora en su mayoría un sensor en la parte posterior que mide las pulsaciones del corazón en tiempo real.

Las conocidas como pulseras de actividad son capaces de medir el ritmo cardíaco del usuario, y lo hacen utilizando un sencillo sensor ubicado normalmente en la parte posterior del dispositivo.

Gracias a los sensores que incorporan las pulseras o GPS, estos son capaces de medir las pulsaciones y también los movimientos de la persona, de ahí que puedan determinar el número de pasos dados a lo largo de un día, las calorías consumidas, etc . Pero ¿de qué tipo de sensor estamos hablando?

Los sensores de ritmo cardíaco donde realmente están teniendo más éxito es en los relojes de muñeca. Aunque algunos smartphones incorporan opciones con medición de ritmo cardíaco, los wearables muestran unos valores más fiables. Si observamos uno de estos sensores, estos están formados por fotodiodos (sensores que emiten luz) donde unos emiten luz y otros se encargan de captar la luz reflejada.

El medidor de ritmo cardíaco se debe colocar cerca de nuestra piel, para que la luz emitida por el sensor llegue a las venas. La medición de la luz reflejada será la que determine la cantidad de sangre que pasa por las venas.

El nivel de sangre que llevan nuestras venas varía en función de la fuerza y frecuencia con la que lata el corazón, de este modo los sensores de los relojes, cuya luz varía en cada latido, son capaces de determinar la frecuencia con la que late el corazón.

Sin embargo, esto solo nos puede servir para hacer una estimación de nuestra frecuencia cardíaca, los sistemas más fiables son los pulsómetros que se colocan sobre una cinta en el pecho y son más precisos, no solo por la mayor proximidad al corazón, si no también por utilizar una tecnología más sofisticada.

Móviles que miden los latidos del corazón

Si en el caso de la pulsera de actividad es el sensor el que mide el ritmo del corazón, los móviles a través de una aplicación también pueden darnos un dato aproximado, aunque mucho menos preciso, de nuestra frecuencia cardíaca. Por ejemplo, la app Accurate Heart Rate Monitor, se ha diseñado específicamente para medir el ritmo del corazón.

Este tipo de aplicaciones funciona de manera muy sencilla, la fuerte luz del flash LED del móvil será capaz es tan potente que si ponemos el dedo delante del objetivo de la cámara penetra hasta las venas, hará una estimación de la cantidad de sangre que llevan las cenas y así calculará cuál es nuestro ritmo cardiaco.

Este tipo de medición, como la del sensor dedicado, es capaz de detectar otras variables  como la necesidad de descanso, las calorías quemadas y los picos de las pulsaciones. 

Al tratarse de una forma de medición pensada para dispositivos móviles, es mucho más intuitivo y sencillo añadir de forma automática los resultados de nuestras mediciones en la app. 

EGC portátil y con inteligencia artificial

El KardiaMobile y el KardiaMobile 6L se han bautizado como el primer dispositivo de ECG portátil con inteligencia artificial. Al contrario que los dispositivos anteriores, estos son mucho más sofisticados y están orientados a usuarios que necesitan tener un especial cuidado de su ritmo cardíaco. 

Pueden indicar a los pacientes con un grado de precisión muy alto si tienen una de las 6 arritmias cardíacas más comunes y pueden determinar si su ritmo cardíaco es normal, lo que da tranquilidad a los pacientes. Gracias a su precisión y prestaciones, es un dispositivo ideal para profesionales del sector sanitario, pacientes con cardiopatías diagnosticadas o con indicios de padecer este tipo de enfermedades.

Tal es el aumento de la concienciación por la salud cardiovascular, gigantes tecnológicos como Apple han incorporado en sus dispositivos la capacidad de hacer EGM, aunque sin la evidencia científica que otorgan dispositivos como KardiaMobile.